La vomitiva deriva izquierdista de la serie “Cuéntame cómo pasó”
Un enfermo de SIDA despedido por una malvada multinacional, policías racistas que acosan y apalean a negros, un hijo repudiado por sus benévolos padres progres por ser trumpista, chicas jóvenes que se plantean como sería el mundo sin hombres… estos temas son sólo algunos dentro del cada vez más izquierdista guion de Cuéntame cómo pasó. La famosa y laureada serie que enseña la vida de una familia española desde los años 60 hasta la actualidad siempre ha tenido un sesgo izquierdista bastante marcado en la representación de sus personajes y escenarios. Sin embargo, en la última temporada, donde se habla de la pandemia de 2020, se han expuesto diferentes asuntos de actualidad desde una visión totalmente parcial.
La familia Alcantara se convirtió casi desde la primera temporada en un modelo arquetípico de familia española, un fiel reflejo donde todos nos sentíamos representados de una u otra manera. Ahora bien, a pesar de que los personajes principales en ocasiones siguen manteniendo cierta dignidad, el resto no son más que avatares o prototipos de todas las ideas progres; la mujer empoderada que odia al marido, la hija rebelde y feminista que rechaza a los hombres, la hija mayor lesbiana y defensora de causas imposibles, el pobre exnovio sidoso despedido de una multinacional capitalista, el hijo que apoya a Trump y que por ello es un racista y es repudiado por sus padres, familiares que advierten de las “fake news” en las redes y recomiendan que hagan caso a las “autoridades”…
Una autentica ensalada de ideas de extrema izquierda que resultan insultantes para aquellas personas que no comparten un ideario socialista, comunista o simplemente progresista. Una serie que enfrenta, que plantea ideas que incitan al odio, al enfrentamiento, al guerracivilismo y a la envidia debería desaparecer de todas las televisiones de España.
